Raquetas guitarreras para las adidas Campus

La capacidad de adidas para generar siluetas icónicas tiene mucho de fidelidad a su propio legado. Hay un buen ejemplo en las adidas Campus, historia de la marca que ha tenido que marcar distancia con dos de sus hermanas más populares: las Stan Smith y las Gazelle.

Claro, cuando rompes a crear zapatillas reconocibles, con tres rayas y suela blanca, a veces diferenciar entre ellas es jugar a las diferencias. Y es lo que le pasa a las Campus.

Estamos ante un modelo que apareció por primera vez en los 80, aunque con otro nombre y una misión distinta a la de acompañarte hoy a todas partes. Por entonces eran las Tournament, enfocadas a las pistas de tenis. Pero no, no eran las Stan Smith, que eran absolutamente blancas ni de piel. Eran de ante en diferentes colores, que quede claro.

Cuando las Tournament pasaron a conocerse como las Campus, queriendo llamar la atención de los universitarios, fue necesario distinguirlas de las Gazelle. Otra prueba de agudeza visual. Puedes distinguirlas fijándote en la puntera reforzada de las Gazelle y en su lengüeta blanca y más ancha.

Y en esta nueva vida, las Campus conectaron con otro público: las bandas de hip hop. Auténticas leyendas ochenteras como Run-DMC y los Beastie Boys las hicieron suyas, y por extensión, sus seguidores.

La verdad es que la variedad cromática, la comodidad y, claro, la autenticidad innegable de estas adidas les permitió ganarse el favor de estos creadores y subirse al escenario, consiguiendo una proyección impagable.

Esto le abrió las puertas de otro movimiento en la siguiente década, en los 90, cuando las adidas Campus fueron uno de los modelos fetiche de las bandas de Britpop. Eso significa que las llevaron formaciones tan míticas como Blur o Echobelly. Hasta las Spice Girls las llevaron, aunque no eran precisamente del mismo estilo.

Durante unos años, nadie se resistía a las adidas Campus y hoy siguen al alcance de tu mano. O de tu estilo personal.